El otoño no sólo trae el frío, sino que este año también llega acompañado de una noticia que afecta directamente al bolsillo de millones españoles: la subida de la tarifa regulada del gas (TUR). 

A partir de octubre, se incrementa la factura de gas, lo que preocupa a muchas familias y empresas. Pero, no todo está perdido. Con soluciones energéticas como las placas solares y la aerotermia, puedes reducir drásticamente los efectos de estas subidas.

Vamos a explicarte de forma simple qué significa este incremento, por qué se produce y que opciones tienes para  enfrentar este nuevo desafío energético.

¿Qué es la tarifa regulada del gas?

La tarifa regulada del gas, también conocida como TUR (Tarifa de Último Recurso), es un tipo de tarifa que fija el Gobierno y que está sujeta a revisiones trimestrales. 

Su principal ventaja es que protege a los consumidores de las fluctuaciones extremas del mercado, ya que no depende completamente de la oferta y la demanda como las tarifas de mercado libre. Sin embargo, en este trimestre, la TUR ha experimentado una subida significativa, lo que se traduce en un incremento en las facturas de todos aquellos consumidores que están acogidos a esta tarifa.

Este octubre ha experimentado una subida debido a diversos factores.

¿Por qué sube la tarifa regulada de gas en octubre?

La principal razón detrás de este aumento tiene que ver con varios factores internacionales. En primer lugar, el precio de las materias primas, como el gas natural, ha subido debido a la inestabilidad en los mercados globales. 

Las tensiones geopolíticas, especialmente relacionadas con la guerra en Ucrania y las sanciones a Rusia, uno de los mayores exportadores de gas, han restringido el suministro, lo que ha llevado a un encarecimiento del gas en los mercados internacionales.

Además, otros factores, como la debilidad del euro frente al dólar, también han influido. Al comprarse el gas en dólares, la depreciación del euro encarece aún más el coste para los países de la Eurozona, incluida España. 

Esta combinación de factores ha llevado al Gobierno a revisar al alza la tarifa TUR, lo que representa un incremento considerable en los recibos de gas a partir de este otoño.

¿Cómo impacta esto en tu bolsillo?

En términos simples, un aumento de la tarifa significa que el coste por consumir gas será mayor.

Este incremento no solo afecta a familias, también repercute en las pequeñas y medianas empresas, especialmente aquellas que dependen del gas para sus procesos productivos, como restaurantes o fábricas industriales. 

Para estos negocios, el aumento de los costes energéticos puede repercutir en la rentabilidad si no logran trasladar estos mayores costes a sus precios, algo que, en muchos casos, no es posible sin perder competitividad.

Estrategias para reducir el impacto de la subida

Aunque la subida de la tarifa del gas es inevitable, existen varias estrategias que puedes poner en marcha para mitigar su impacto en tu factura, todas relacionadas con las energías limpias:

Uso de energía solar

Una de las mejores formas de reducir el consumo de gas es complementarlo o sustituirlo por fuentes de energía renovable como las placas solares.

Una instalación fotovoltaica puede reducir considerablemente tu dependencia del gas al utilizar la energía del sol para generar electricidad o calentar agua. Con las múltiples ayudas y tipos de financiación, se elimina la barrera económica de la inversión inicial y hace más accesible el ahorro energético.

Optimización del uso de calefacción y agua caliente sanitaria con aerotermia

Uno de los mayores consumidores de gas en los hogares es la calefacción por lo que sustituir tu caldera por una tecnología más eficiente, es una alternativa que, aunque requiere una inversión inicial, puede ayudar a disminuir considerablemente el consumo de gas y la factura a lo largo del tiempo.

La aerotermia es una tecnología que permite extraer energía del aire exterior para climatizar el hogar, reduciendo así la necesidad de utilizar gas para la calefacción o la producción de ACS.

Un escenario de cambios energéticos

Este incremento en la tarifa del gas nos recuerda que estamos inmersos en un escenario de transición energética. La dependencia de los combustibles fósiles, como el gas natural, y la volatilidad de los mercados energéticos internacionales nos exponen a fluctuaciones que pueden desestabilizar nuestra economía doméstica. Por esta razón, es crucial que empecemos a pensar en alternativas sostenibles y en la diversificación de nuestras fuentes de energía.

El impulso hacia energías limpias, como la solar o la aerotermia, no solo es una medida para combatir el cambio climático, sino también una estrategia para protegernos de las fluctuaciones de los precios energéticos.

A medida que la tecnología avanza y estas alternativas se vuelven más accesibles económicamente, los hogares y empresas que adopten estas soluciones serán los más protegidos frente a las subidas de precios.